Alarmantes cifras de hospitalizaciones por intento de suicidio en adolescentes preocupan a especialistas y autoridades en la región de Valparaíso debido al impacto de la pandemia en la salud mental de los jóvenes.
Según datos proporcionados por la Sociedad Chilena de Pediatría (SOCHIPE), el Hospital Carlos Van Buren ha registrado hasta siete atenciones médicas diarias por intentos de suicidio entre adolescentes durante este año y el pasado. Esta preocupante situación ha llevado a la creación de una alianza entre la SOCHIPE, el Servicio Nacional de Educación de Valparaíso, el Hospital Carlos Van Buren y la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) con el objetivo de abordar esta grave crisis.
Para enfrentar la situación, se realizó un seminario dirigido a docentes de la región de Valparaíso bajo el nombre “Efectos post pandémicos en el desarrollo neurológico y salud mental de la población escolar”. En este encuentro, se destacó la importancia de estar atentos a los cambios en el comportamiento de los estudiantes, como irritabilidad, violencia, dificultades de aprendizaje y depresión, que han surgido a raíz de la pandemia y las cuarentenas prolongadas.
Carlos Schmidt, presidente de la SOCHIPE, hizo hincapié en que el regreso a la presencialidad escolar ha evidenciado problemas de salud mental en los niños y jóvenes, y que es fundamental brindarles el apoyo necesario para su bienestar emocional. La psicóloga Paula Ascorra, docente de la PUCV, agregó que es fundamental estar atentos a los cambios de signos, síntomas y comportamientos que pueden persistir durante semanas o meses y generar malestar en los adolescentes.
La alianza entre las instituciones tiene como objetivo capacitar a más de 300 docentes en temas de salud mental para poder detectar a tiempo a los estudiantes que necesiten apoyo y derivarlos adecuadamente para evitar complicaciones. El director ejecutivo del Servicio Local de Educación Pública de Valparaíso, Daslav Mihovilovic, destacó la relevancia de esta colaboración y la importancia de enfocarse en la salud mental de los estudiantes en el período post pandemia.
El trabajo conjunto entre profesionales de la salud y docentes resulta crucial para brindar el apoyo necesario a los jóvenes afectados y promover un ambiente propicio para su bienestar emocional y desarrollo integral. La atención temprana y adecuada puede marcar la diferencia en la vida de estos adolescentes, ayudándolos a enfrentar los desafíos que surgen en el contexto actual y recuperar su equilibrio emocional.