Una madre devastada por la pérdida de su hija entregó un testimonio desgarrador tras el accidente en un bus en el Cerro Cárcel de Valparaíso, ocurrido el pasado lunes 29 de enero y que cobró la vida de la pequeña de 7 años.
La niña, junto a su padre y hermana menor, se encontraba dentro de un vehículo que fue impactado por el bus, sufriendo quemaduras con el incendio posterior al choque. Tras permanecer en estado grave en el Hospital Carlos Van Buren, los especialistas informaron su fallecimiento durante la mañana de este martes.
Su padre, aunque fuera de riesgo vital, fue trasladado a una sala de menor complejidad, mientras que su hermana menor se mantenía estable con una lesión grave que debería sanar en los próximos días, según informó David Gutiérrez, director del recinto asistencial.
La madre de la niña, Javiera Olguín, en declaraciones, exigió justicia por su hija, afirmando que “me la arrebataron de mis brazos”. “Me dejó muerta en vida”, expresó visiblemente afectada. “Mi hija está descansando y yo no voy a descansar hasta que la persona responsable pague”, añadió.
Javiera Olguín, quien viajaba dentro del bus accidentado, resultó también herida con lesiones en las costillas y contusión pulmonar. “No me acuerdo de nada del accidente, solo desperté cuando yo estaba con oxígeno y Matilda (su hija fallecida) estaba entrando a pabellón”, relató a la prensa.
Antes del fatídico lunes, Olguín planeaba viajar con su hija a España “para cambiarle el futuro. Ahora no la dejaré en un cementerio”, expresó. Informó que el cuerpo de la menor será cremado, llevando sus cenizas al país europeo.
El accidente se produjo cuando el bus, proveniente de Santiago, avanzó hacia una zona de difícil acceso siguiendo las indicaciones del GPS, desbarrancándose y chocando contra dos automóviles, uno de los cuales se incendió.