Reanudan búsqueda del sacerdote Miguel Woodward en Cementerio de Playa Ancha como parte del Plan Nacional de Búsqueda
En una significativa diligencia judicial y forense, este jueves se realizaron excavaciones en el Cementerio N°3 de Playa Ancha, en Valparaíso, como parte de la investigación por la desaparición forzada del sacerdote chileno-británico Miguel Woodward, detenido en septiembre de 1973 durante la dictadura militar.
La operación fue encabezada por el ministro en visita de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, Max Cancino, y se enmarca en el Plan Nacional de Búsqueda de Verdad y Justicia, impulsado por el Estado para esclarecer casos de violaciones a los derechos humanos ocurridos entre 1973 y 1990. En la diligencia participaron también la directora del Servicio Médico Legal y el ministro de Justicia, Jaime Gajardo.
Las labores, lideradas por la Policía de Investigaciones (PDI) en conjunto con el Servicio Médico Legal (SML) y profesionales del programa de Derechos Humanos del Ministerio de Justicia, incluyeron excavaciones guiadas por tecnología de georradar, la cual permite identificar movimientos de tierra anómalos, aunque no detecta restos orgánicos directamente.
“El procedimiento se realizó tras una declaración testimonial que señalaba haber visto movimientos de arrojo de cadáveres en este sector del cementerio. A raíz de ese testimonio, se planificó esta diligencia para determinar si existen restos humanos asociados al caso”, explicó el ministro Cancino.
El sacerdote Miguel Woodward fue detenido poco después del golpe militar de 1973. Según antecedentes recopilados por organismos de derechos humanos, fue trasladado al buque Lebu y posteriormente al Hospital Naval, donde se habría perdido su rastro. Desde entonces, se le considera víctima de desaparición forzada.
La diligencia busca dar con posibles restos del religioso y se suma a otros esfuerzos realizados previamente en distintos puntos de Valparaíso. Las autoridades esperan que este nuevo operativo aporte información clave para avanzar en la causa y entregar respuestas a la familia de Woodward y a la sociedad en su conjunto.