La Corte Suprema de Viña del Mar emitió un fallo condenatorio en el caso de una mujer acusada de causar la muerte de su hija como resultado de intoxicarla con cocaína a través de la leche materna. La sentencia impuso una pena de 540 días de presidio efectivo a la acusada por su responsabilidad en el cuasidelito de homicidio.
El tribunal determinó que la mujer actuó con dolo eventual, siendo consciente de los efectos perjudiciales que la droga tendría en la salud de su hija. Además, se reveló que en 2017, cuando ocurrieron los hechos, la acusada había recibido suministro de Cabergolina para evitar la lactancia y se le informó sobre los riesgos asociados en un centro de salud.
A pesar de ser consciente de los riesgos y de haber recibido asesoramiento médico, la mujer optó por alimentar a su hija con su leche materna, lo que resultó en un fallo multiorgánico en la menor debido a la intoxicación por cocaína en el domicilio de la condenada.
No obstante, el tribunal reconoció que la acción de amamantar es un acto instintivo en muchas ocasiones, ocurriendo incluso mientras la madre está somnolienta o adormecida, lo cual ayuda a descartar la existencia de una aceptación consciente por parte de la acusada sobre el daño que podría ocasionar a su hija con su acción. Según manifestaron desde la corte, se trata más bien de un acto reflejo de naturaleza instintiva.
Con esta sentencia, la Corte Suprema de Viña del Mar ha dejado clara su postura respecto a la responsabilidad de los padres en el cuidado de sus hijos y la importancia de tomar decisiones informadas y responsables en relación con la lactancia materna y el consumo de sustancias nocivas para la salud de los lactantes.
La condenada cumplirá su pena de presidio efectivo como resultado de su actuar negligente, que tuvo consecuencias trágicas para su hija.