El gobernador de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, ha declarado que “nadie puede descartar, a estas alturas, el Estado de Excepción” en la capital, tras el homicidio del cabo Daniel Palma. Orrego dijo que antes del asesinato del carabinero, ya había advertido que “este era el momento más crítico en materia de seguridad en la historia del país y en la Región Metropolitana”.
Según él, nunca había visto tantos homicidios, no solo de carabineros, sino también de civiles, ni tanto poder de fuego en manos de los delincuentes.
Orrego dijo que la primera persona que le escuchó hablar sobre ese tipo de medida “no fue ningún parlamentario de derecha. Fue el alcalde de Pedro Aguirre Cerda, Luis Astudillo, independiente, que en la población La Victoria estuvo cuatro días sin clases por los tiroteos de las bandas de narcos, que dispararon más de mil tiros en menos de tres días”.
Según el gobernador, hay una suerte de desborde del crimen organizado que requiere medidas drásticas, tanto legislativas como operativas, y habrá que estudiar si es una cosa general o focalizada. En ese sentido, el exalcalde de Peñalolén argumentó que en distintos lugares, hay “mucha gente que vive en un Estado de Excepción de facto, pero que no lo ha puesto el Estado, lo han puesto los narcos”.
Orrego subrayó que el hecho de que Carabineros registre un tercer mártir en menos de 23 días tiene que “llamar a la reflexión a todos los sectores políticos, especialmente a los de Apruebo Dignidad, que sistemáticamente torpedean los esfuerzos de su propio Gobierno” en materia de seguridad. Según él, hay un doble discurso que le hace mucho daño al país.
La situación de la delincuencia en la Región Metropolitana ha sido un tema de preocupación constante para las autoridades y la población en general. En los últimos meses, se han registrado un aumento significativo en los delitos armados y violentos en distintos sectores de la capital, lo que ha generado alarma en la ciudadanía y ha llevado a las autoridades a tomar medidas más drásticas para combatir la delincuencia.