Hoy sábado se registró un sismo de magnitud preliminar 7,6 en la escala de Richter en el este de Filipinas, según informó la agencia Europa Press. El evento desencadenó una alerta de tsunami para diversas áreas del Pacífico, abarcando Filipinas, Malasia e Indonesia, emitida por el Centro de Advertencias de Tsunami de EEUU.
El epicentro se situó en la isla de Mindanao, la segunda más grande del archipiélago y la más oriental de las Filipinas, con una profundidad de 63 kilómetros, según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) y el Centro Sismológico Europeo-Mediterráneo (EMSC).
Aunque en un principio se evaluó la posibilidad de un riesgo de tsunami en las costas de Chile, el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) descartó finalmente la amenaza. Sin embargo, en Filipinas, el departamento de sismología advirtió sobre la posibilidad de olas destructivas, instando a la población costera a evacuar de inmediato hacia zonas más elevadas. Las autoridades locales prevén alturas de olas superiores a un metro por encima de las mareas normales, con riesgo potencialmente mortal en bahías y estrechos cerrados.