Tohá descarta “amnistía general” para migrantes irregulares y aclara proceso de regularización
La ministra del Interior, Carolina Tohá, aseguró que el Gobierno no implementará una “amnistía general” para migrantes en situación irregular en el país y reiteró que aún no se ha oficializado un proceso de regularización.
Desde un punto de prensa este miércoles, Tohá enfatizó que el Ejecutivo sigue evaluando opciones, pero dejó claro que, a diferencia de administraciones anteriores, cualquier regularización tendrá requisitos estrictos, comenzando con el empadronamiento biométrico. “No será el único requisito: será necesario demostrar la ausencia de antecedentes penales, arraigo laboral o familiar en el país”, puntualizó.
La jefa de gabinete recordó que cualquier avance está condicionado a la resolución del Tribunal Constitucional, al que la UDI recurrió para impugnar una eventual regularización. “Hasta que no haya un pronunciamiento, no podemos iniciar ningún proceso. Cuando el Gobierno decida avanzar, haremos un anuncio formal”, aseguró.
Tohá también subrayó la importancia de diferenciar entre quienes llegan al país con intenciones de trabajar y cumplir la ley y aquellos que delinquen.
Por su parte, el subsecretario del Interior, Luis Cordero, señaló que más de 119 mil personas que no se empadronaron durante el proceso voluntario están obligadas a abandonar el país. Además, precisó que no se regularizará automáticamente a los 180 mil migrantes que sí cumplieron con el trámite.
Advierten posibles efectos negativos
El diputado y precandidato presidencial Vlado Mirosevic expresó su preocupación por posibles efectos adversos de la regularización, señalando un posible “efecto Cúcuta”, en referencia al fenómeno ocurrido tras el viaje del expresidente Sebastián Piñera a esa ciudad colombiana, que generó una percepción de invitación a Chile.
“Chile ya alcanzó su capacidad de recepción de migrantes hace tiempo. Debemos ser muy cautos para evitar repetir ese escenario”, concluyó Mirosevic.